El cordero es un alimento con múltiples beneficios en una dieta equilibrada. Con un alto índice de micronutrientes como son el hierro, fósforo y zinc. Además destaca el aporte de proteínas de alto valor biológico, que aportan todos los aminoácidos esenciales para el ser humano.
Con gran aporte de vitaminas del grupo B, especialmente riboflavina (B2), tiamina (B1), ácido fólico (B9) y cianocobalamina (B12).
La composición lipídica varía según el tipo de producción y la edad de sacrificio del animal. Cabe destacar que la presencia de grasa es determinante en el aporte de sabor, aroma, terneza y valor nutricional. Además de aportar ácidos grasos esenciales, así como vitaminas liposolubes (A, D, E y K).
Con un índice de grasa menor incluso que el pollo. A este bajo índice en grasa se suman los beneficios de una relación inmejorable entre poliinsaturado y saturados, lo que la convierten en una carne de excelente aporte nutricional.
Con un alto contenido en proteínas y vitaminas del tipo B la convierten en un alimento completo y lleno de beneficios.
Por otra parte sus cualidades de sabor, aroma y textura hacen de la carne de cabrito una delicia gastronómica con múltiples posibilidades de elaboración.